Bernardo Morrás de Goñi nació en Barbarín, Navarra, España, el trece de diciembre de 1921. Sus padres fueron Mateo y Esperanza, el único varón en medio de cuatro hermanas, una familia cristiana que a los tres días de nacido lo bautizaron en la Iglesia Parroquial de San Juan Evangelista.

Estudió en la escuela primaria de su pueblo y luego la terminó en Pamplona, desde 1928 hasta 1935. También hizo su bachillerato en Pamplona, desde 1936 hasta 1938, en este período siente insistentemente el llamado al Señor.

Al terminar sus estudios ingresó a la Compañía de Jesús el primero de septiembre de 1939 en el Noviciado de Loyola, España. Finalizada esta etapa inició sus estudios de Juniorado en Loyola, de 1941 hasta 1943. En el curso de 1943-1944 comenzó la Filosofía en Oña, Burgos, hasta 1946 donde obtuvo su licenciatura.

De 1946 a 1949 fue destinado al Colegio de Tudela, Navarra, España, como profesor inspector en la etapa de Magisterio.

Finalizada la etapa anterior regresó a Oña, para realizar los estudios de Teología de 1949 hasta 1953. En el tercer año de estudios fue ordenado de sacerdote, el treinta de julio de 1952 siendo el ordenante Monseñor Eduardo Martínez, Obispo de Zamora.

Un año después de terminar su Teología hizo la Tercera Probación en Gandía, Valencia, España, teniendo como instructor al P. Francisco Segarra, S.J.

En 1955 fue destinado a la Escuela Apostólica de Javier para desempeñarse como Padre Espiritual de los alumnos menores, y ese mismo año hizo los Últimos Votos el dos de febrero de 1955 en el Colegio.

Su siguiente misión apostólica fue en Burdeos, Francia, en el Hogar Español en 1956 como vicario cooperador. Este Hogar fue fundado por el P. Garamendi, S.J. y se convirtió en un punto de acogida de españoles que huyeron del país a causa de la guerra española. Su servicio se prolongó algunos años después de finalizarse la contienda. Este Hogar fue un auténtico anticipo del Servicio Jesuita a Refugiados.

En 1957 el P. Bernardo Morrás, S.J. fue a la Residencia de Zaragoza para desempeñarse como operario.

Cinco años después fue a la Residencia de Huesca como operario, y al poco tiempo pasó a formar parte del Equipo Misionero en República Dominicana donde participó en las misiones populares.

Su primer contacto con Venezuela fue en 1965, destinado al Noviciado de Los Teques como operario y misionero popular hasta 1967. Luego fue a Punto Fijo, Estado Falcón, a la Residencia San Pedro Canisio para trabajar como vicario cooperador en Nuestra Señora de Coromoto, operario en Cujicana y Bella Vista, enseñó catecismo en las escuelas, trabajó en Fe y Alegría, director de la Legión de María y cursillos de cristiandad.

De 1970 hasta 1987 fue al Instituto Técnico Jesús Obrero para desempeñarse como vicario cooperador, profesor de bachillerato nocturno, prefecto espiritual de los alumnos. También estuvo en la Parroquia como vicario cooperador, animador de las actividades y comunidades apostólicas del Barrio Blandín de la misma parroquia. Le tocó colaborar en la pastoral con el P. Carlos Díaz Guillén, S.J.

En 1988 fue destinado nuevamente a Punto Fijo como Párroco de la Parroquia Padre Nuestro del barrio Cujicana, con atención aproximada de unas 10.000 personas, siendo también vicario parroquial y ministro de la Comunidad San Pedro Canisio hasta 1996.

Fue en 1997 a vivir en la Comunidad del Colegio San Ignacio, colaboró en la pastoral de la Parroquia Nuestra Señora de Coromoto en Guarenas como operario y confesor en apoyo del P. Pío Zabala, S.J. En 1998 fue a vivir a Guarenas y pasó a ser vicario cooperador de la Parroquia hasta 2001.

Su siguiente destino fue Barquisimeto, a la Parroquia Jesús de Nazaret en La Carucieña, donde colaboró en la pastoral de la Parroquia desde 2002 hasta 2003.

En el 2004 pasó a vivir en la comunidad de la Enfermería Provincial, donde atendió las capellanías que se ofrecían hasta 2011.

El P. Bernardo Morrás, S.J. era un alma de Dios, buscando siempre cómo hacer el bien. Caminar un día junto a él era hacer una romería de actos de caridad y de apostolado.

El doce de junio de 2011 falleció el P. Bernardo Morrás de Goñi, S.J. en la Enfermería Provincial, tenía 89 años de edad y setenta y un años de Compañía.

En una carta que le envió el P. General Peter-Hans Kolvenbach, S.J., por sus cincuenta años de Compañía, describía su labor como: “A nombre propio y de la Compañía, agradezco a usted todo lo que por ella ha orado, trabajado y sufrido durante este medio siglo que el Señor le ha concedido vivir gozosamente en su servicio (…) Usted ha sabido entregarse al cumplimiento de la misión en todos y cada uno de esos apostolados con abnegación y entusiasmo, destacándose como ferviente promotor de la Legión de María y del Apostolado de la Oración”.

Damos gracias a Dios por la vida y obra del P. Bernardo Morrás de Goñi, S.J., y pedimos que su ejemplo nos anime en la misión encomendada.

Schirley Echenique

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