La beatificación del Dr. José Gregorio Hernández el pasado mes de abril ha sido un acontecimiento que ha llenado de consolación a toda la Iglesia en Venezuela. El testimonio de beatitud del Dr. Hernández se presenta en medio de una compleja realidad que nos pide discernimiento y fidelidad al Buen Espíritu que no deja de obrar aquí y ahora. La reliquia del beato ha comenzado a recorrer las Parroquias de toda la arquidiócesis. El pasado viernes 16 de julio ha visitado la Parroquia Universitaria La Epifanía del Señor de la UCV. Esta visita ha estado signada por la alegría y la renovación de la fe. La reliquia ha recorrido la ciudad universitaria compartiendo un signo de esperanza en la universidad más allá de la difícil situación que toda la comunidad universitaria vive en estos tiempos. El Hospital Clínico Universitario, el Decanato de la Facultad de Medicina, el Instituto de Medicina Experimental José Gregorio Hernández, el Instituto de Medicina Tropical Dr. Félix Pifano y el Rectorado han sido los lugares donde la reliquia fue recibida. En un acto sencillo y cargado de un valor simbólico y espiritual, en cada lugar se compartió un momento de encuentro, oración y reflexión sobre el significado de tan particular visita de este insigne ucevista.

Hay que destacar la recepción gozosa de los representantes de cada una de las instituciones. Hubo un verdadero aprecio y valoración ante la visita de la reliquia manifestada en los detalles de la preparación para su recepción y en la participación de los involucrados. Eso dice mucho de la gran riqueza humana y espiritual que sigue estando en muchísimos integrantes de la comunidad universitaria de la UCV, aunque en algunos casos sea la negatividad lo que quiera presentarse como el absoluto de la universidad. Si algo ha manifestado la visita de la reliquia es precisamente que la principal esperanza se anida en nuestra gente. José Gregorio viene a reconectarnos con lo mejor de nosotros mismos y nos impulsa a “salir del propio amor querer e interés” (EE.EE. 189) y nos invita a trascender la realidad apostando por seguir trabajando para generar condiciones de posibilidad que abran nuevos horizontes de encuentro, reconciliación y justicia en nuestra realidad.

En horas de la tarde, de regreso a la Parroquia, se ha compartido una Hora Santa y la Eucaristía con la participación concurrida de la feligresía y el regalo musical de la Coral de la Misa Criolla bajo la dirección de Leonardo Guzmán. La significativa participación de la profesora María Isabel Giacopini, estudiosa de la persona de José Gregorio, compartiendo la semblanza personal y académica del beato, fue de mucho enriquecimiento para todos, ayudando a comprender y valorar aún más el sentido de la presencia de la reliquia en medio de la comunidad.

El sábado 17, en horas de la mañana, una comisión de fieles se acercó a la Parroquia de San Pedro para entregar la reliquia a esa comunidad, quienes la recibieron en medio de la celebración eucarística. Un signo de la comunión eclesial.

Un agradecimiento especial a todos los voluntarios de la Parroquia que sirvieron con un espíritu generoso en la preparación y desarrollo de la visita. Ha prevalecido un ambiente de consolación y participación que agradecemos al Señor.

En definitiva, la reliquia ha permitido conectar vivamente con el testimonio de un ucevista bienaventurado. En ella se han enaltecido y renovado los valores más genuinos que sustentan la misión de nuestra alma máter ante el país. Agradecemos este mensaje de fe, fortaleza y esperanza que este momento ha transmitido como signo de la presencia del Dios de la vida que camina con nosotros. Que el Dios de la vida bendiga nuestra UCV y a cada ucevista donde quiera que se encuentre. Que el Beato José Gregorio Hernández interceda por nuestra Venezuela ¡José Gregorio es nuestro!

Javier Fuenmayor, S.J.