Soy un voluntario desde hace dos años en la Parroquia Universitaria La Epifanía del Señor, de la Universidad Central de Venezuela (UCV), mi participación en la comunidad se ha venido desarrollando en tareas tales como la olla solidaria, la entrega de ropa y medicamentos, entre otras. Todas estas actividades han estado orientadas a servir a las personas que necesitan de un apoyo oportuno que les permita vincularse, y considerar la fe en nuestro Señor Jesucristo.

Llegué a la Parroquia con muchas expectativas, con deseos de ayudar al prójimo, brindando mi esfuerzo, compromiso y dedicación en procura de ofrecer a otros unos momentos de esperanza y reencuentro con Dios.

Este transitar me permitió encontrarme y conocer los Ejercicios Espirituales (EE.EE.) de San Ignacio de Loyola. Ha sido un camino a través de las lecturas y la vida cotidiana, que me ha permitido la internalización de un enfoque donde se conjugan el esquema ignaciano de modos, medios y fines. La vivencia de los Ejercicios me permitió una vinculación más estrecha con mi amigo Dios, acercarme más a él y reafirmar la convicción de amar y servir, convirtiéndose en una invitación a profundizar cada día más en la práctica de los mismos.

En la experiencia como ejercitante de los EE. EE., he obtenido muchos beneficios, a saber:

  1. El encuentro con Jesús.
  2. Reencuadrar mis desapegos.
  3. Adquirir nuevos conocimientos, herramientas y experiencias.
  4. Estar atento diariamente a las mociones y el discernimiento.
  5. Agradecer siempre todo y a todos.
  6. Reafirmar las convicciones de amar, servir, apoyar, colaborar y luchar.
  7. Fortalecer el deseo de aprender más sobre los Ejercicios y fomentarlos en otros con el ejemplo, y la motivación espiritual.
  8. Obtener herramientas de consolación y afrontamiento ante la desolación.

Otros aspectos asimilados característicos de los EE. EE. y su constante práctica fue el reconocimiento de las mociones internas, la cercanía e invitación de contactar a Dios, dándome cuenta de quién soy y a dónde quiero ir, establecer un diálogo íntimo entre Jesús y yo, a través de una conversación de un amigo a otro amigo, logrando herramientas para afrontar nuestra lucha interna y la constancia que hay que tener ahora y siempre.

Los Ejercicios Espirituales representan ser una herramienta para la vida, los cuales permiten el conocimiento de nuestro mundo interno y la vinculación con Dios. Es reconocerlos como un eje rector de nuestro continuo caminar en esta vida.

En todo amar y servir.

Edgar Rafael Hernández

Parroquia Universitaria La Epifanía del Señor